Fallido estruendo del atónito sueño,
Esperanzado amanecer que el tiempo paralizas,
Resoplar henchido del dulce gemido,
Que con el alba finalizas.
Recuerdo anonadado del momento atento,
Que emprendes el hechizo del ser en movimiento.
Réquiem por un protagonista herido
Que apenas en un suspiro, eco es del sueño,
Estallido que al morir el ego prevaleces,
Ternura insondable que en mi sueñas,
Recuerda pues quien eres, energía manifiesta.
Un instante, un sonido, un eco desvalido,
La auténtica señal del que es ya sumergido,
En miles de apariencias, en miles de sonetos,
Y aún cuando del amanecer abierto,
Abre sus alas al viento, si te detienes un segundo,
En ese sumergir profundo, como estela sagrada,
Tu vida y tu caminar consagran.
INCIENSO (Boswelia Carterii)
Hace 14 años
No hay comentarios:
Publicar un comentario